TIPO: PARQUE ARQUEOLÓGICO
CRONOLOGÍA: EDAD DEL BRONCE ÉPOCA ACTUAL
Localizado en la carretera nacional 301, a la
altura del cruce con la que se dirige a Minateda y La Hora, es una muela rocosa
de perfil característico en la que se concentra el mayor número de restos
arqueológicos de la Comarca, debido a que se trata del núcleo de población
que tuvo mayor importancia comarcal en la antigüedad romana y visigoda. Se
identifica con la ciudad de llunum citada por el geógrafo Ptolomeo y con la
Ello visigoda.
Su posición estratégica, controlando la vía de
comunicación que enlaza Cartago Nova y Complutum (Alcalá de Henares) ha
convertido este sitio en la clave del sur de Albacete para entender el proceso
de romanización de las sociedades indígenas, su posterior transformación y en
uno de los lugares en los que se recibe la naciente civilización islámica en
el sur de Castilla-La Mancha.
Destacan de este enclave el camino de ruedas, las
murallas de época ibérica, romana y visigoda y los edificios públicos de la
plataforma superior, uno de los cuales, de grandes dimensiones, es el que se
está documentando en la actualidad.
También destaca el conjunto de tumbas
monumentales de la zona norte, fechadas en el siglo II y I a. de C.,
correspondientes posiblemente a principios ibéricos.
Por todo el lugar se descubren infinidad de tumbas
excavadas en la roca, seguramente altomedievales, silos y cisternas de
almacenamiento de líquidos y evidencias de conjuntos artesanales,
especializados en la elaboración del aceite o el vino.
El uso continuado de este lugar como núcleo de
población, permite contemplar por sus laderas diversos ejemplos de casas cueva,
algunas en un inmejorable estado de conservación, que ilustran sobre el modo de
vida de nuestros más inmediatos antepasados.
Hoy todos los esfuerzos públicos se están
dedicando a la creación de un Parque Arqueológico, con la construcción de un
centro de interpretación para la atención adecuada al visitante, que va a
permitirnos ofrecer una de las infraestructuras culturales más originales de
nuestra región.
El yacimiento de El Tolmo de Minateda, uno de los cinco Parques
Arqueológicos en proceso de creación en la Comunidad de Castilla-La Mancha,
estuvo ocupado entre la Edad del Bronce (hacia 1500aC) y la época islámica
(siglo X dC). La ciudad llevó el nombre de llunum en la época romana y
de Eio o Elo en la visigoda, en tanto que los árabes la conocieron como Madînat
Yyih.
El Reguerón |
A la entrada se puede observar el camino de acceso antiguo, un ramal de
la vía que desde Cartagena llevada a Alcalá de Henares primero y a Toledo
después, con entalladuras ocasionadas por el tránsito de carros con llantas de
hierro y largas muescas perpendiculares para facilitar el paso de personas y
caballerías.
El acceso está protegido por un impresionante conjunto de fortalezas que
responden a momentos y técnicas constructivas muy diversas. La más antigua es
una muralla de mampostería ataludada por su cara exterior, cuya versión actual
corresponde al siglo III dC, pero que engloba construcciones más antiguas.
Hacia el año 9 aC, según una inscripción monumental encontrada, este muero
se forró con otro de sillería para conmemorar la concesión a la ciudad del
estatuto municipal, posiblemente con el nombre de llunum.
Vista del interior de las estructuras
defensivas |
Siglos después, hacia el VI dC, durante las guerras entre visigodos y
bizantinos, la muralla romana fue utilizada como cantera para aportar materiales
a un gran baluarte que avanzava sobre la línea defensiva anterior. Todo este
conjunto se arruinó pronto, con el desplome de los sillares que rellenaron la
vaguada y cayeron sobre le camino.
La superficie del cerro se encuentra llena de vestigios labrados en la roca,
entre los que destacan las partes rupestres de ingenios para prensar uva o más
bien aceituna, esto es, de almazainforma acerca a una de las fuentes de riqueza
de la población.
Planta de la basílica |
Sin duda el principal descubrimiento de las últimas campañas ha sido un
complejo basilical de los más importante de la Península Ibérica, que en la
actualidad está siendo objeto de consolidación. Es de tres naves separadas por
columnas, con ábside en la cabecera y un baptisterio a los pies que
experimentó varias reformas. Se conservan también la zona del altar y parte de
los canceles, así como basas y fustes de columnas y arquerías desplomadas.
Vista del baptisterio |
Este hallazgo refuerza la hipótesis de que el yacimiento corresponde a Eio
o Elo, sede episcopal y una de las siete ciudades citadas en el pacto por el
que Teodomiro, noble visigodo, se somete a los dominadores islámicos a cambio
del mantenimiento de sus privilegios. Numerosas tumbas de este época son
visibles por todas las laderas.
Necrópolis medieval |
Alpiedel farallón norte pueden verse algunos vestigios de una de las
necrópolis ibéricas de la ciudad. Son monumentos funerarios cuadrangulares
realizados con sillares encuadrados y loculus central, que en origen estaría
cubierto por la parte superior del monumento. En él se depositó la urna
cineraria y su correspondiente ajuar. Su fecha puede colocarse entre finales del
siglo II aC. y la primera mitad del siglo aC.
Necrópolis Ibérica |
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